jueves, 30 de octubre de 2008

Trucos para consumir menos combustible

Ahorro de combustible

Realizar una conducción moderada y eficiente no sólo ayuda a mejorar la seguridad vial si no que es además la mejor herramienta para disminuir el consumo de combustible y paralelamente reducir las emisiones contaminantes asociadas.

Y es que, según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), simplemente con tener en cuenta algunas precauciones a la hora de ponerse al volante se puede conseguir un ahorro medio de carburante del 15%. La conducción eficiente también tiene otras muchas ya que podemos reducir también la contaminación acústica e incluso un importante ahorro en de los costes del mantenimiento del vehículo (frenos, embrague, caja de cambios y motor).

Conducción eficiente, ahorro en combustible

Al arrancar el coche no pises el acelerador. En el caso de los motores de gasolina inicia la marcha inmediatamente después del arranque y en los Diesel conviene esperar unos segundos antes de iniciar la marcha.

La primera marcha es recomendable utilizarla sólo para el inicio de la marcha y cambiar a segunda a los dos segundos o seis metros aproximadamente.

Al inicio del recorrido avanza a una velocidad moderada, acelerando progresivamente. Espera a que la temperatura del motor se estabilice para demandar la máxima potencia. Además, ten en cuenta que los acelerones en frío someten a esfuerzos extras al motor, reducen su duración e incrementan el consumo.

Circula a unas 2.000 ó 2.500 revoluciones por minuto en coches de gasolina y a unas 1.500 ó 2.000 revoluciones por minuto en los Diesel.

Conduce con anticipación y tranquilidad, evitando los frenazos, las aceleraciones bruscas y los cambios de marchas innecesarios. Mantén una adecuada distancia de seguridad y circular a una velocidad regular, ya que de esta forma se puede ahorrar entre un 10% y un 15% de carburante.
Modera la velocidad, ya que además de mejorar la seguridad, por encima de los 100 km/h el consumo de combustible se multiplica.

Apaga el motor del vehículo en paradas superiores a un minuto.

Cuando se circula bajando una pendiente, conviene levantar el pie del acelerador y aprovechar así la inercia del coche, utilizando el cambio y el pedal de freno para efectuar pequeñas correcciones y ajustar la velocidad. No dejes el cambio de marchas en punto muerto, ya que no sólo es peligroso, sino que además el coche consume más.

Al subir una pendiente, lo mejor es utilizar la marcha más larga posible, pisando el acelerador lo justo para mantener la velocidad.

Y además...

No conduzcas con las ventanas bajadas, ya que esto provoca una mayor resistencia al movimiento y, por lo tanto, mayor esfuerzo del motor y mayor consumo.
Utiliza el aire acondicionado sólo lo imprescindible ya que su uso aumenta hasta un 20% el consumo.

Los accesorios exteriores aumentan la resistencia del vehículo al aire y por lo tanto incrementan el consumo de carburante. Por ello, no es recomendable transportar objetos en el exterior del vehículo o en la baca si no es estrictamente necesario.

El peso de los objetos transportados en el vehículo y el de sus ocupantes influye sobre el consumo de manera apreciable, sobre todo en los arranques y periodos de aceleración.

Mantener en buen estado el motor ayuda a no consumir más combustible del necesario: Es importante tener limpio el aceite y el filtro del aire para que la combustión sea más eficiente. Las bujías deben mantenerse sin residuos de la combustión con el electrodo en buen estado y los inyectores libres de obstrucciones.

Los filtros de combustible obstruidos o con un desempeño limitado no sólo disminuyen el funcionamiento del motor, sino que pueden contribuir a que la suciedad contamine el sistema de combustible y el motor se desgaste.

Vigila la presión de los neumáticos, una presión incorrecta incrementa el consumo hasta un 10%, reduce la vida de los neumático y disminuye la seguridad.

Fuente: Supermotor.com

miércoles, 29 de octubre de 2008

El automóvil más rápido del mundo


SSC Ultimate Aero


El SSC Ultimate Aero es un automóvil superdeportivo producido por el fabricante estadounidense Shelby Super Cars, desde el 2006 hasta la fecha. Actualmente, es el automóvil de producción más rápido del mundo, con una velocidad máxima documentada de 413.83Km/h.


Esta velocidad fue reportada durante las pruebas realizadas el 13 de febrero del 2007 en West Richland, Washington, Estados Unidos, verificado por el Libro Guinness de los récords el 9 de octubre del mismo año.


De esta manera rompió los récords del McLaren F1 GT, Koenigsegg CCR y del Bugatti Veyron. Según el fabricante, el Ultimate Aero es aerodinámicamente estable a velocidades de hasta 437 Km/h.


El auto está fabricado con materiales ligeros como aluminio y fibra de carbono, y posee un motor con dos turbocompresores que desarrollan 1180 caballos de fuerza. Tiene un precio de venta de U$ 600,000, menos de la mitad de lo que cuesta el Bugatti Veyron.


Se tiene previsto producir un total de 25 autos. Los futuros planes de la empresa contemplan la producción de un auto de cuatro puertas, cuatro asientos, destinado a convertirse en el sedán deportivo de lujo mas rápido del mundo, pues se espera que pueda lograr una velocidad máxima de 352 Km/h y también una versión con 2 motores eléctricos del Ultimate Aero el cual dice el constructor que será el auto eléctrico mas rápido del mundo.

Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/SSC_Ultimate_Aero

Conducir bajo la lluvia

Esto es un artículo muy interesante publicado en Terra:

Tips para conducir bajo la lluvia

La lluvia es causa de una serie de factores que afectan el manejo de nuestro auto y que pueden ponernos en situaciones de riesgo, por lo que manejar en lluvia requiere de mayor concentración y precaución, ya que el agua provoca que el asfalto sea resbaladizo, provocando la pérdida del control del auto.

Nuestro auto necesita tracción para acelerar, girar o detenerse, las ruedas desarrollan dicha tracción cuando el asfalto está limpio y seco, pero si nos topamos con contaminantes como la tierra, el lodo, el hielo, la nieve o el agua, entre otros, el agarre disminuye.

La textura del pavimento marca la diferencia respecto a un buen o mal agarre del auto, por ejemplo, el asfalto que está muy dentado, es decir; con textura poco lisa, puede ofrecer una mejor tracción cuando hay presencia de humedad.

Muchas veces los choques bajo la lluvia son consecuencia de conductores que no guardan su distancia al conducir, existe poca visibilidad o bien son reacciones de personas que tienen miedo de manejar bajo la lluvia y caer en algún bache que no tienen identificado. En fin, son muchas las causas que forman parte de la gama de accidentes provocados a causa de la lluvia, por lo que manejar bajo este fenómeno requiere de mayor concentración y precaución al volante.

A continuación te damos algunos tips para que los lleves a cabo cuando manejes en terreno mojado;

- Guarda la distancia; no te acerques demasiado al vehículo que llevas delante para evitar el denominado efecto spray, donde la lluvia pulverizada y sucia va a parar a tu parabrisas, además, en caso de tener que frenar tendrás poco espacio para detener tu auto, aumentando la probabilidad de estrellarte contra el auto de enfrente.

- Cambio de temperatura; el cambio de temperatura interior y exterior empaña los cristales, por lo que es necesario hacer uso de la recirculación del climatizador o aire acondicionado.

- No realices movimientos bruscos; recuerda que la lluvia y la niebla reducen la adherencia de las llantas sobre el asfalto hasta en un 50%, lo que implica mayor probabilidad de perder el control del auto ante cualquier situación no esperada.

- Frena con suavidad y a pisadas cortas; esto es con la finalidad de no bloquear la dirección y secar la humedad de las pastillas. En caso de haber pasado por algún lugar donde el agua tiene un nivel alto, después de haber salido del gran charco o parte inundada, se recomienda que se frene dos o tres veces para secar los tambores y/o los discos, seguramente se mojaron las pastillas de los frenos, continúa manejando despacio y pisa en repetidas ocasiones con el vehículo prendido, el pedal de freno suavemente a efecto de secar la superficie de frenado de los discos y/o tambores mojados.

- Enciende las luces; es muy importante ver y ser visto cuando llueve. Si la lluvia es muy intensa, debes encender las luces de niebla delanteras y traseras, además de la luz de corto alcance. Si vas muy despacio, no dudes en poner el warning para anunciar que vas a una velocidad más reducida. Algunas veces nuestros faros están sucios o bien no iluminan lo suficiente, esto puede contribuir a la posibilidad de que tengamos un accidente o bien a que corramos el riesgo de atropellar a alguien por la falta de visibilidad. Es indispensable que limpies los faros de tú auto o bien que cambies los faros de halógeno por unos de xenon, que incrementarán notablemente la visibilidad en condiciones de lluvia fuerte.

- Precaución con los baches; nunca atravieses un charco muy grande sin comprobar su profundidad o que otro auto haya pasado antes. Evita pasar por lugares donde el nivel del agua sea alto, ya que si llega a entrar agua en el motor, puede provocar una avería grave y muy costosa. Recuerda que es mejor manejar a baja velocidad, ya que si por casualidad llegamos a caer en un bache, entre más rápido conduzcamos, mayor será el golpe que reciba nuestra llanta y mayor será la probabilidad de que lastimemos el neumático y el rin. Estos golpes pueden ser tan fuertes que hasta la suspensión puede resultar dañada en un impacto de esta naturaleza.

- Precaución a la hora de rebasar; solo rebasa en caso muy necesario, házlo con mucha precaución y recuerda guardar tú distancia con el auto de enfrente.

Algunos tips de mantenimiento preventivo para evitar un accidente cuando llueve son;

- Mantener la presión de las llantas en el nivel recomendado y reemplázalos cuando sea necesario. - Reemplaza cada año los limpiaparabrisas y aplicar al parabrisas algún producto que disperse la lluvia para tener mejor visibilidad.

- Revisa el depósito del líquido limpiaparabrisas y rellenarlo con líquido especial.

El aquaplaning

Las llantas pueden tener lo que se denomina aquaplaneo, que es la acumulación de agua entre la llanta y el piso, situación que disminuye la tracción de nuestro auto. Las llantas lisas tienden a ser susceptibles al aquaplaneo, ya que el dibujo de las mismas, es lo que permite que el agua sea desalojada para permitir mayor agarre al manejar.

Este es uno de los efectos más peligrosos de la lluvia, debido a que provoca el deslizamiento y el descontrol del auto a causa de que las llantas son incapaces de evacuar el agua que hay en el asfalto.

Para evitarlo, se recomienda no frenar y levantar suavemente el pie del acelerador, al mismo tiempo que se sujeta con fuerza el volante. No intentes cambiar la trayectoria del auto y no frenes hasta que sientas que el auto ha recuperado el contacto con el suelo.